México se perfila hacia una sociedad del conocimiento: Conacyt

Con el aumento en la inversión en ciencia, tecnología e innovación, México se encamina hacia una sociedad y economía del conocimiento, destacó el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

El Gasto en Investigación Científica y Desarrollo Experimental ascendió a más de 91 mil millones de pesos en 2014, lo que representó 0.54 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), cifra superior a los 39 mil millones de pesos reportados en 2000, indicó el Conacyt.

Este incremento permitió que más estudiantes reciban una beca para continuar sus estudios de posgrado y un aumento en el número de científicos en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), de acuerdo con la Agencia Informativa del Conacyt.

En ese sentido, añadió el Conacyt, de 2006 a 2014 se duplicó el número de becarios de 20 mil 111 a 57 mil 426, mientras que el SIN aumentó su plantilla de investigadores al pasar de mil 466 científicos en 2000 a 21 mil 359, en 2014.

Lo anterior contribuyó a que la producción científica y tecnológica se incremente mediante un mayor número de artículos publicados en revistas indexadas y en el número de patentes.

En la publicación de artículos se registró un aumento de 138 por ciento, pues en 2000 los científicos mexicanos difundían sólo cuatro mil 861 textos, mientras que en 2013 se alcanzó la cifra de 11 mil 547.

Respecto al número de patentes, éstos aumentaron 180 por ciento, pasando de 431 a mil 211, en el mismo periodo, resaltó el Conacyt.

En la actualidad, recordó, se continúa fomentando el vínculo entre el sector académico, empresarial y gubernamental para impulsar la denominada “triple hélice” y avanzar más rápido hacia la sociedad y economía basada en el conocimiento.

Por ello, la inversión en investigación y desarrollo por parte del sector empresarial se triplicó, al pasar de seis mil 048 millones de pesos en 2000 a 22 mil 726 millones, en 2011.

Agregó que a la par se incrementó la infraestructura científica y tecnológica en México, prueba de ello son los parques tecnológicos construidos en Jalisco, Nuevo León e Hidalgo.